¿Hacia dónde se dirige el mercado laboral?

Por Eduardo Tovilla Lara

Conocer cuál es el futuro más próximo del empleo nos ayuda a canalizar esfuerzos como empleados y empleadores para mantenernos a flote en un mercado laboral sumamente cambiante. Por esta razón, yo Eduardo Tovilla me di a la tarea de compartirles las tendencias laborales puestas sobre la mesa en el Foro Económico Mundial realizado en el primer trimestre de 2024. A continuación, les comparto de manera general cuáles son, así como las principales preocupaciones al respecto.

  1. Aumento desigual de la productividad debido a la IA

La adopción de la inteligencia artificial en los procesos internos y externos de las empresas está destinada a impactar la productividad y la innovación en la economía mundial. No obstante, esta revolución tecnológica no se distribuirá de manera uniforme, sobre todo, entre los países de renta baja.

Se proyecta que, en naciones con altos ingresos, la IA generativa tendrá un impacto considerable en el aumento de la productividad, particularmente, en sectores como tecnologías de la información, servicios financieros, atención médica, comercio minorista y manufactura. Sin embargo, la situación es menos optimista para los países de bajos ingresos, ya que existe una creciente preocupación por los riesgos asociados, como la automatización y el desplazamiento laboral, que podrían agravar la brecha de desigualdad económica.

En relación con lo anterior, se demandan urgentemente políticas y estrategias que aborden tanto las oportunidades como los desafíos que presenta la IA generativa, especialmente, en regiones donde el impacto podría ser más pronunciado.

  1. Crecimiento de los empleos digitales

Para 2030, se estima que habrá alrededor de 92 millones de empleos digitales en todo el mundo, con remuneraciones más atractivas. Estos empleos se concentrarán en los países de ingresos más altos, pero también tendrán impulso en las economías de ingresos más bajos. Por lo tanto, esta tendencia tiene el potencial de abordar la escasez de talento calificado en regiones desarrolladas, así como de abrir oportunidades de empleo y crecimiento económico para los trabajadores jóvenes en países en desarrollo.

La gestión adecuada de estos empleos digitales a nivel global podría ser clave para aprovechar plenamente su potencial. Al utilizar talento de todo el mundo, se amplía el pool de habilidades disponibles para los empleadores, convirtiéndose en una vía para el crecimiento económico inclusivo en una variedad de contextos.

  1. Posible alza del desempleo

A pesar de la notable resiliencia que demostró el mercado laboral en el año 2023, el panorama futuro sugiere un posible aumento en los niveles de desempleo a nivel global. Las proyecciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) apuntan a un incremento en la tasa de desempleo mundial del 5.1 a 5.2 por ciento para el año 2024, lo que representa dos millones más de personas en búsqueda de empleo.

Aunque en Estados Unidos el mercado laboral ha mostrado cierta fortaleza, con la creación de más de 350 mil nuevos puestos de trabajo en el primer mes del año y una tasa de desempleo del 3.7 por ciento, la situación global es más compleja. Por un lado, persisten desigualdades importantes entre países de ingresos bajos y altos, y, por el otro, los jóvenes enfrentan un riesgo 3.5 veces mayor de estar desempleados en comparación con la población adulta en general. 

A pesar de estos desafíos, hay optimismo en relación con el impacto de la inteligencia artificial en los empleos, sugiriendo que no será un “apocalipsis laboral”. No obstante, hay que poner foco en el reciclaje profesional, la mejora de las habilidades y el aprendizaje continuo como elementos clave para gestionar la transición hacia un mercado laboral cambiante. 

  1. Más oficinas “pop-up

El panorama laboral también está experimentando una transformación notable, marcada por un cambio en la percepción y el diseño de los espacios de trabajo. LinkedIn ha observado una disminución significativa en las ofertas de empleo totalmente remoto, pasando de un punto máximo del 20 por ciento, en abril de 2022, a sólo un 8 por ciento, en diciembre de 2023.

Aunque esta tendencia sugiere un resurgimiento del interés por las oficinas físicas, el trabajo remoto o híbrido sigue siendo atractivo para muchos empleados, con aproximadamente un 46 por ciento de las solicitudes mostrando preferencia por esta modalidad. Esta competencia entre la oficina y el trabajo desde casa es un estímulo para la innovación, ya que las empresas se ven obligadas a crear entornos laborales que prioricen la interacción humana dinámica.

Este cambio también refleja las preferencias de la generación más joven de trabajadores, especialmente, aquellos que están ingresando al mercado laboral por primera vez. Martin Kocher, Ministro Federal de Trabajo y Economía de Austria, señaló que muchos jóvenes valoran la conexión humana y prefieren los puestos de trabajo híbridos sobre los remotos.

En este contexto, ha surgido una interesante iniciativa: los pueblos austriacos están estableciendo oficinas comunitarias “pop-up”, que funcionan como espacios de trabajo itinerantes. Estas oficinas proporcionan una alternativa atractiva para aquellos trabajadores que desean evitar el trabajo desde casa, pero no desean desplazarse hasta las sedes corporativas. Además, permiten acceder a otros servicios y recursos cercanos, creando así un entorno laboral más dinámico y colaborativo.

  1. Las habilidades serán aún más importantes

La evolución del mercado laboral hacia un entorno cada vez más dinámico y tecnológico, ha puesto de relieve la importancia de las habilidades en el futuro del empleo. Se espera que casi una cuarta parte de los puestos de trabajo experimenten cambios significativos en los próximos cinco años, lo que requerirá que millones de personas se adapten y se muevan entre empleos en declive y en crecimiento.

En este sentido, se ha explorado la necesidad de habilidades transferibles y el potencial de la inteligencia artificial (IA) para ofrecer oportunidades de aprendizaje personalizado y aumentar la productividad, por lo tanto, el verdadero desafío radica en la capacidad de las personas para adaptarse y utilizar eficazmente la IA y otras tecnologías digitales, con el propósito de evitar que aquellas que carezcan de esta capacidad sean desplazadas por las que sí la tengan.

En razón de lo anterior, hay que preparar a las personas para ser más productivas y competitivas en un mercado laboral impulsado por la tecnología, donde el dominio de las habilidades digitales será fundamental para el éxito profesional y la empleabilidad a largo plazo.

  1. Más mujeres se incorporan al mercado laboral

Según el Banco Mundial, la eliminación de las diferencias económicas de género podría generar un “dividendo de género” de 172 billones de dólares para la economía mundial, por lo que es importante articular acciones para cerrar la brecha de género en el ámbito laboral, la cual al día de hoy es de 60 por ciento.

En este sentido, hay que apoyar a las madres para que puedan reincorporarse al trabajo, ya que más de 600 millones de mujeres en edad laboral en todo el mundo no trabajan debido a responsabilidades de cuidado no remuneradas, en comparación con sólo 40 millones de hombres en la misma situación. Se sugiere la implementación de políticas y programas que faciliten el acceso a servicios de cuidado infantil asequibles y de calidad. 

Espero que estas tendencias laborales sirvan a los empleados y empleadores para cambiar el panorama laboral a su favor. Como Eduardo Tovilla Lara, considero vital que las organizaciones incorporen a sus planes y estrategias algunas acciones concretas que impacten en la productividad de sus equipos de trabajo.